Friday, January 9, 2009

Obama y la agenda del inmigrante indocumentado

La agenda del inmigrante indocumentado mexicano en los Estados Unidos se divide en dos: los inmigrantes que ya están en los Estados Unidos y los inmigrantes que llegan diario a los Estados Unidos.

La economía norteamericana va de mal en peor en términos de caída de la producción y crecimiento de desempleo. Conforme se acentúe la crisis, los números de inmigrantes que llegan diario a los Estados Unidos tienden a disminuir y ellos difícilmente van a ser considerados en la agenda de la administración de Obama (pensando en términos de creación programas de trabajadores huésped). En relación a los inmigrantes que ya se encuentran en los Estados Unidos, las fuerzas del mercado laboral se van a encargar de reubicarlos, primero dentro de los Estados Unidos y después hacia afuera de los Estados Unidos. Esto último significaría que la economía norteamericana estaría metida en un atolladero de proporciones apocalípticas.

Obama ha propuesto dar prioridad a la generación de empleos productivos para levantar la economía (y no nada más repartir dinero entre los contribuyentes, como Bush pensó y actuó en su momento). Aquí la pregunta es: ¿Cuál es el valor que la administración Obama y el nuevo Congreso le dan a la mano de obra indocumentada? Si a este escenario agregamos que, históricamente, cuando hay desempleo masivo en los Estados Unidos la actividad de grupos anti inmigrantes pulula de manera virulenta… pues el panorama en general se puede volver muy adverso a cualquier posibilidad de amnistía general para los indocumentados.

Aunque Obama también ha sido claro: ciertos sectores tendrán prioridad sobre otros en el proceso de recuperación de la economía desde el punto de vista de expansión de gasto gubernamental. ¿La mano de obra indocumentada podría ser considerada para ciertos sectores? ¿Cuál será la reacción de la opinión pública norteamericana ante un plan de rescate que considere implícitamente a los indocumentados, esto es, que a la hora de repartir los empleos generados con dinero federal, no se pida ningún tipo de prueba de ciudadanía?

Tarde o temprano Obama va a tener que confrontar el tema del papel de los indocumentados en la recuperación económica de su país. Lo ideal sería que la recuperación económica se encargase solita de darle o regresarle sus empleos a los inmigrantes. Pero si las cosas en los Estados Unidos siguen empeorando, no resulta difícil imaginarse que la retórica anti inmigrante de algunos miembros del Congreso sobre la conveniencia de deshacerse de los “illegal aliens”, que supuestamente estorbarían a la recuperación económica, marcaría el tono de la discusión sobre la cuestión de los indocumentados. Y la pregunta entonces sería: ¿Qué hacer con ellos?

Tiempos difíciles en el horizonte, sin duda alguna. Aunque, pensando acerca de “lo ideal” para el inmigrante mexicano en los Estados Unidos, ¿qué no sería “más ideal” que el mexicano encuentre un medio digno de vivir en su propio país, sin verse en la necesidad de emigrar para conseguir tal fin?

No comments:

Post a Comment